Cachorrita de casi 3 meses, previsiblemente de tamaño mediano de adulta. Es un torbellino de pura energía limpia, adora a las personas y le encanta jugar. Su mamá es una Podenca de pelo duro.
Esta podenca campanera fue utilizada en una rehala en Castilla, y durante esa etapa le cortaron las orejas y la cola, lo que unido al abandono la ha convertido en una perrita extraordinariamente desconfiada.